Estas son algunas de las pautas sencillas que recomiendo para mejorar la mayoría de problemas relacionados con el sueño:
Los problemas más frecuentes que refieren los padres con respecto al sueño:
Dificultad para iniciar o mantener el sueño.
Somnolencia diurna excesiva
Ronquidos u otros problemas respiratorios durante el sueño.
Movimientos o comportamientos anormales antes o durante el sueño.
El pediatra puede dar unas pautas sencillas para mejorar la mayoría de problemas relacionados con el sueño, y lo primero que indicará a la madre es que lleve un DIARIO DEL SUEÑO de más o menos 15 días. Existen formularios para llevar el diario pero puede realizarse en un cuaderno anotando día a día:
Hora de irse a la cama.
Hora de dormirse.
Despertares nocturnos.
Movimientos anormales.
Ronquidos.
Hora de levantarse.
Horas de sueño.
Somnolencia excesiva diurna.
Videos, con cámaras o celular son de gran ayuda para definir cuál es el PRINCIPAL PROBLEMA DEL SUEÑO y para que el pediatra indique exámenes complementarios y en caso necesario polisomnografía (estudio completo del sueño).
Recuerde que las horas aproximadas que debe dormir un niño son:
Bebés de 0 a 3 meses: de 14 a 17 horas (incluidas las siestas) es el patrón más variable.
Bebés de 4 a 12 meses: de 12 a 16 horas (incluidas las siestas)
Niños pequeños de 1 a 2 años: de 11 a 14 horas (incluidas las siestas)
Niños de 3 a 5 años: de 10 a 13 horas (incluidas las siestas)
Niños de 6 a 12 años: de 9 a 12 horas
Adolescentes de 13 a 18 años: de 8 a 10 horas.
Recomendaciones generales para crear un hábito saludable del sueño:
Mantener horarios estables para dormir y despertar.
Acostar al niño despierto en su cama.
Establecer una rutina presueño 10 a 20 minutos antes. que sirve para crear el hábito; que muchas veces requiere de 4 a 6 semanas (en promedio 21 días) para mostrar resultados. por ejemplo:
baño tibio
leer un cuento
música suave
comer algún alimento (un vaso de leche con banano)
"estas recomendaciones por separados no sirven, solo sirven para crear la rutina"
No dormir al niño en los brazos para llevarlos a la cama.
No trasnochar a los niños.
Temperatura adecuada del cuarto.
No acostumbrarlos a dormir con la luz o la televisión prendida.
No tener TV, computador, celulares o tabletas en la habitación
No asociar ir a la cama con castigo.
No administrar café, chocolates, dulces o gaseosas.
Algunos productos como el baño líquido de hierbas pueden ayudar.
Si tienes más preguntas sobre este tema, contáctate conmigo en reyba8@gmail.com
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