Los padres y especialmente las madres les da miedo y en ocasiones genera muchas angustia (“genitofobia”) limpiar los genitales de los niños por miedo a lastimarlos y en las niñas romper el himen (virginidad).
Los genitales de los niños no se infectan casi nunca. La acidez de la orina y las secreciones normales los protegen y por lo tanto no hay que limpiarlos exhaustivamente, solo se deben limpiar suavemente con agua y jabón adecuado.
Al pene de los niños no hay que hacerle ningún “ejercicio” para bajar la piel que lo cubre (prepucio) con la excusa que si no lo hace se va a infectar o va a requerir cirugía (circuncisión). Todo lo contrario; cuando se hace este ejercicio por los padres e incluso por médicos o enfermeras; la piel presentar desgarros y pequeños sangrados que luego cicatrizan y producen endurecimiento de la piel (fibrosis) y no permiten que normalmente baje el prepucio y terminan los niños en cirugía.
El pene de los bebés presenta erecciones no motivadas que normalmente hacen que el prepucio vaya bajando y luego en niños más grandes encuentran su pene y lo manipulan presentando erecciones que cumplen la misma función. De 100 niños con estrechez del prepucio (fimosis) normalmente sin hacer ningún ejercicio 90 les baja bien el prepucio a los 4 años. Los niños que requieren circuncisión son menos del 10%. (10 de 100)
La aparición de una masa blanquecina debajo de la piel que cubre el glande (prepucio), que se observa a simple vista a través de la piel no es pus, no significa que es una infección y menos que se deba retirar. Es una acumulacion de secrecines normales llamada esmegma y que ayuda a que la piel se separe del glande y favorece que el prepucio baje naturalmente.
El pediatra puede indicar en algunos niños crema tópica a base de corticoides que se aplica en la piel que cubre el pene por 3 a 4 semanas, asociado a una tracción muy suave que no produzca desgarro de la piel y sin hacer ningún “ejercicio” para ayudar a que el prepucio baje.
Los genitales de las niñas se puede presentar unión de los labios menores de la vagina (fusión de labios menores) no es una malformación congénita, que se puede observar desde el nacimiento y durante el examen físico realizado por el pediatra, o que se produce por el miedo de limpiar la zona genital. No es una condición grave; puede causar irritación y mal olor, pero casi nunca infecciones y la mayoría de las veces se resuelve sin ninguna intervención . El pediatra indica crema tópica a base de estrógenos para ser aplicada por 4 a 6 semanas y luego separar suavemente los labios.
Es normal que los niños mayores de 2 años presenten erepciones motivadas o no, que son normales. Sin embargo erepciones frecuentes y dolorosas pueden ser un signo de anemia de celulas falciformes.
Si tienes más preguntas sobre este tema, contáctate conmigo en reyba8@gmail.com
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