El dolor en las piernas de los niños es un motivo muy frecuente de consulta y la mayoría de las veces son benignos, no requieren ningún tratamiento especifico. Pero siempre es necesario que los niños sean valorados por el medico pediatra.
Los dolores recurrentes y autolimitados en las extremidades para los que los padres, el niño y el medico no tienen explicación, a menudo se denominan "dolores de crecimiento". Este termino que es muy popular entre los padres y personal de salud no deberia usarse; porque genera una falsa tranquilidad, que puede retrazar diagnostico graves (tumores oseos, leucemia etc.) que tratados a tiempo pueden curarse o controlarse.
El termino mas adecuado es "dolores nocturnos idiopáticos de la niñez" o "dolores recurrentes de las extremidades de la niñez", son benignos y generalmente se resuelven dentro de uno o dos años desde el inicio. Sin embargo, los dolores de crecimiento pueden ser angustiantes para los pacientes y los cuidadores, y es importante distinguir estos síntomas benignos de las causas patológicas del dolor que requieren investigación y tratamiento adicionales.
En general, el término "dolores de crecimiento" se usa para describir a los niños con dolor en las extremidades (más comúnmente en las extremidades inferiores y bilateral) que ocurre principalmente al final del día o en la noche y que, por lo demás, no tienen ninguna manifestación de problemas musculoesqueléticos. Este tipo de dolor generalmente no requiere evaluación más allá de una historia clínica y un examen físico completos. Pero los niños con dolores en la articulaciones inexplicables que ocurren en asociación con la actividad o que están asociados con otros síntomas sistémicos merecen una mayor investigación.
No se sabe con certeza la causas del dolor, “pero crecer no duele”. algunos estudios relacionan los dolores con la disminución de la densidad ósea (“descalcificados”), con actividad física exagerada, laxitud aumentada frecuente en algunos niños, niños con genu valgo (“rodillijunto patiapartado”) niños con niveles bajos de vitamina D en sangre e hijos de padres que en la niñez sufrieron de "dolores del crecimiento".
Los dolores nocturnos idiopaticos benignos generalmente comienzan entre los 3 y los 12 años de edad, el dolor se presenta principalmente en las extremidades inferiores, suele ser bilateral y se localiza en la profundidad de las piernas, por lo general en el muslo. En niños mayores (de 6 a 12 años), el dolor puede describirse como calambres, sensación de hormigueo o piernas inquietas. El dolor ocurre principalmente en las horas de la tarde o la noche y puede interrumpir el sueño. Por lo general, se resuelve por la mañana. El dolor se alivia con masajes, calor o analgésicos como acetaminofén o ibuprofeno. El examen físico durante y después de los episodios es normal.
Una historia familiar de dolores de crecimiento o quejas reumáticas es común.
Los dolores son crónicos pero episódicos, por lo general ocurren al menos una vez por semana, con una duración general que a menudo puede durar años y persistir hasta la adolescencia. Sin embargo, pueden ocurrir períodos libres de síntomas de días, semanas o meses entre episodios.
Referencia: Dolores de crecimiento Autor: Suzanne C Li, MD, PhD
Recomendaciones para consultar:
Siempre hay que agendar una cita por consulta externa con pediatría para descartar anormalidades de la marcha o enfermedades graves.
Cuando el dolor se acompaña de otro síntoma.
Pérdida de peso
Inapetencia
Palidez, debilidad o malestar general
Dolor es unilateral o se presenta en la misma pierna siempre.
Los dolores no desaparecen en la mañana.
Si ademas duelen las articulaciones; rodillas, codos, muñecas, tobillos etc.
Los dolores ocurren 3 o más veces por semana.
Si tienes más preguntas sobre este tema, contáctate conmigo en reyba8@gmail.com
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